*Por Jorge Joury, desde Pinamar
Aún circulan por todos los rincones las historias que en la Argentina se robaron por lo menos 13 mil millones de dólares del Estado. También que hay dinero enterrado en algún lugar, como también joyas y hasta relojes valuados en cuatro millones de la moneda norteamericana. Son las manchas que han dejado algunos personajes de la política, convirtiendo a la corrupción en una pandemia difícil de erradicar.Tal vez por eso el periodista Hugo Alconada Mon le puso de título a su nuevo libro de Editorial Planeta : "La raíz de todos los males". La presente es una crónica descarnada de una charla sin filtro, donde el colega de La Nación saca a la luz un mundo de ambiciones, poder, impunidad y una voracidad sin límites, que desafía cualquier peldaño de la imaginación.
Las misteriosas historias del dinero sucio, continúan sumando capítulos para el asombro en la vasta enciclopedia de la leyenda urbana. Sin embargo, hasta el momento el voluminoso dinero físico se mantiene en la clandestinidad con paradero desconocido. Para el periodista y abogado Hugo Alconada Mon, quien investigó resonantes causas, "parte de los millones de la corrupción están ocultos en la Argentina. Llámese en contenedores enterrados que muchos caza tesoros buscan aún hoy por el territorio de las estancias de Lázaro Báez en el Sur. O en sótanos. También en departamentos a nombre de testaferros o en cajas de seguridad en lugares inimaginables. Pero además es lógico suponer que otra parte de esas sumas astronómicas salieron del país y viajaron hacia paraísos fiscales donde aún no llegó el largo brazo de la Justicia".
Estas revelaciones las hizo el periodista de La Nación durante una charla a sala llena en el Teatro Municipal de la Torre en Pinamar, paralizando al público. Fue durante la presentación de su libro titulado "La raíz de todos los males". También aclaró ante una pregunta de Agenhoy que "no solo hay efectivo por localizar, sino que también la plata está puesta en cientos de propiedades a nombre de testaferros, como también en joyas, relojes, diamantes, obras de arte y muebles antiguos".
El periodista platense puso énfasis en "el caso de un ex funcionario que vendió un reloj con papeles que tenía un valor de casi 4 millones de dólares. Este hombre salió del país con el reloj en la muñeca y pasó los controles de Ezeiza y nadie lo paro, porque no se pone la lupa sobre lo que uno lleva puesto .Después lo trasladó a una joyería de esa marca en Francia y con los papeles en mano allí se lo compraron, con una quita de un 20% de comisión. Desde ese país, el dinero ya blanqueado, luego es fácil girarlo a cualquier banco suizo. Lo mismo ocurre con los diamantes, que pueden viajar en un bolsillo pequeño del pantalón y ser negociados en el mercado negro".
El periodista reveló que sus investigaciones por lo general llevan más de dos años y hay una que aún no ha publicado que cumplió diez.Detalló que en una ocasión se encerró durante cuatro días en un cuarto de hotel en el exterior, hasta que recibió el llamado de un informante.
También aclaró que buscó en una oportunidad a un hombre de apellido Lucero, haciendo 250 llamados con la guía nacional, hasta que dio con un hermano que le dijo que la persona buscada había fallecido, pero le hizo puente con otra que tenía la información buscada. "Estuve días buscando ese dato", confesó, al revelar cuales son sus técnicas operativas.
Alconada Mon contó también que "mucho dinero sucio era para financiar las campañas políticas" y argumentó, que "para postularse a intendente se necesita un millón de dólares y para Presidente, cien millones de la misma moneda.Pero ahora, después de los cuadernos de Centeno, los políticos se van a cuidar en este proceso electoral. Tampoco habrá empresarios dispuestos a arriesgarse a poner plata".
También Alconada Mon, sin empacho disparó que "en 2015 Mauricio Macri financió la campaña de Sergio Massa, para quitarle votos al kirchnerismo".
El periodista de La Nación, que ya ha desentrañado muchos casos, como las valijas de Antonini Wilson, Siemens o los Papeles de Panamá, a la hora de cuantificar la corrupción en el país señaló: "En 750 grandes causas investigadas entre 1980 y 2007 sólo se condenó al 3% de los involucrados, con un desfalco estimado de 13.000 millones de dólares para las arcas públicas. El sistema funciona a la perfección y se regula a sí mismo, en una red donde los eslabones de la cadena se protegen entre sí".
También contó que en una oportunidad, en una de sus investigaciones comprobó un caso de corrupción con uno de los sponsor más importantes del diario. La comunicó a sus jefes y estos la certificaron con los propios empresarios involucrados, quienes advirtieron que si la noticia si se publicaba les quitarían los aportes publicitarios que representaban anualmente un millón de dólares. " Pese a las pérdidas económicas, el diario decidió publicar mi trabajo y eso honra la profesión", aclaró.
Al ser requerido sobre las veces que la Justicia lo había llamado a comparecer durante el gobierno kirchnerista, Alconada Mon aclaró que "solo fue en cuatro oportunidades.En cambio con este gobierno me llamaron 47 veces. También recibí muchas amenazas de muerte. Pero nunca hice una denuncia. Solo lo puse en conocimiento de mis jefes por si algo me ocurría".
Alconada Mon detalló que en principio pensó titular su libro como: "Las cloacas". Pero su madre le dijo que no le gustaba Es más, le advirtió que le iba aconsejar a sus amiigos que no lo compraran. Fue así que rectificó el rumbo y finalmente accedió a ponerle tras una gran compulsa familiar: "La raíz de todos los males". Seguido aclaró: "Mi madre es un tractorcito".
Reveló que cuando escribe sus notas, por precaución son monitoreadas por un editor en jefe y un cuerpo de abogados que corrigen sus textos para evitar acciones legales.
A reglón seguido especificó que en uno de sus investigaciones sobre lavado de dinero llamó a cuatro especialistas en el tema, a quienes dio por separado las conclusiones de su trabajo. "Al cabo de dos días y en forma separada todos llegaron a la misma conclusión. Efectivamente se trataba de un caso de lavado de dinero. Chequear es fundamental, para ser confiable", añadió.
En su radiografía, Alconada Mon manifestó que 'la corrupción es como el tango, se necesitan dos para bailarlo. Hay ocasiones en la que es el político el que pide y hay otras en que es el empresario el que mueve la primera ficha, porque sabe que no puede ganar jamás si no fueran con un soborno. En otras el político te aprieta financieramente para que tengas que venir al pie. El corrupto argentino es un tipo educado, de bajo perfil, casado, sin grandes gastos, que no llama la atención y que paga los impuestos. Uno de los principios de un buen lavador es que paga los impuestos, para que no lo agarren como a Al Capone", explicó el autor que también inmediatamente agregó que "el sistema sabe elegir a sus hombres. El que no sirve es aquel que se puede estrellar con su auto, con una prostituta a su lado y que cuando le abren el baúl encuentran un kilo de droga. Cada tanto, sin embargo, algún personaje rompe la regla, una anomalía que también es funcional al sistema".
Alconada Mon los califica "faros en las tiniebla. Son, aquellos que sirven para guiar a los otros corruptos hacia aquel que aceptará una oferta poco honorable".
Seguramente Hugo Alconada Mon tendrá más historias aún a confirmar en el cajón de su escritorio , pero sacando del escenario el caso de los bolsos con 9 millones de dólares de José López, el grueso de la plata de la corrupción, el protagonista principal de esta historia, por ahora no muestra señales de vida. ¿Será cierto que se robaron un PBI, cómo asegura Carrio?. Entonces habrá que buscar un Banco Central oculto en algún lugar.
*Jorge Joury es licenciado en Ciencias de la Información, graduado en la UNLP y analista político. Su correo electrónico es jorgejoury@gmail.com. Para consultar su blogs, dirigirse al sitio: Jorge Joury De Tapas.
https://soundcloud.com/radio-97-7/130219-primeramanana-jorge-joury
