Según la CAME, buena parte de las PyMES no pueden competir y cierran sus puertas. Hay más del 45 mil despidos en el sector.

Las importaciones de bienes de consumo crecieron 17% en 2016 y 22,5% en el primer mes de 2017 y por el tipo de cambio atrasado, los altos costos internos y la falta de controles aduaneros, están comprometidas buena parte de las PyMES industriales que no pueden competir con los productos que ingresan.
Según Confederación de la Mediana Empresa (CAME), están cerrando fábricas y hay más de 45 mil despidos en el sector.
La entidad, señaló que la avalancha externa se presenta también en el comercio informal, por las fronteras con Chile, Paraguay y Bolivia y paulatinamente, las importaciones están volviendo a copar el mercado y desplazandoal fabricante local.
Indica que como consecuencia del tipo de cambio atrasado, los altos costos domésticos y la falta de controles aduaneros, muchas industrias se están viendo desplazadas por productos que llegan en algunos casos formalmente, a través de la Aduana, y en otros mediante contrabando de países limítrofes como Paraguay, Bolivia y Chile.
"Estas industrias son, entre otras, la indumentaria, la naval, de calzados, juguetes, electrónicos, muebles, cueros, bicicletas, bebidas alcohólicas y las producciones regionales", destacó e indicó que no se trata solo de manifestaciones aisladas de algunos fabricantes proteccionistas como suele decirse cuando aparecen las advertencias.
"Hay evidencia estadística concreta que avala esta preocupación. En 2016 las importaciones bajaron 6,7%, pero el declive se explica porque los precios cayeron 10,4%, en cambio, las cantidades importadas subieron 3,8% en el año y en los bienes de consumo, la entrada del exterior creció 9,1% en dólares en 2016, a pesar que los valores promedio de esos productos bajaron 6,7%", precisó la CAME.
Y agregó que las cantidades importadas de estos artículos crecieron 17%, en un mercado donde las ventas minoristas cayeron 7% promedio en el año, ingresaron bienes de afuera más baratos, pero en mayor cantidad, justo en un año donde los argentinos consumieron menos.
Eso explica la caída de casi 5% en la producción industrial, especialmente en la industria PyME, indicó la CAME.
Los productores locales plantean lo que denominan la paradoja sectorial: el propio Estado Nacional es quien compra materiales y embarcaciones, que podrían fabricarse en el mercado local, afuera.