Las personas altas tienen un riesgo mayor de desarrollar el cáncer en parte debido a que tienen más células para que la enfermedad se expanda, según un estudio publicado en los Estados Unidos.

Investigadores norteamericanos analizaron la población en tres continentes y descubrieron que el riesgo de contraer cáncer, tanto en hombres como en mujeres, es 10 % superior por cada 10 centímetros de altura.

El cáncer se desarrolla cuando el control normal por el cuerpo de las células deja de funcionar, allanando el camino para que se desarrollen las células cancerígenas que se manifiestan como tumores.

El trabajo fue publicado en la revista Proceedings of Royal Society B y sugiere que el riesgo de desarrollar diferentes tipos de cáncer es más probable en las personas altas simplemente porque tienen más células, y por lo tanto más posibilidades de que esas células se conviertan en cancerígenas.

Se cree que algunos mamíferos como los elefantes y las jirafas, cuyos cuerpos tienen una mayor cantidad de células que los animales más chicos, desarrollaron defensas adicionales contra el cáncer. Pero no hay pruebas de que esto funcione de la misma manera en individuos como los seres humanos.

La altura promedio varía según las regiones, pero en Estados Unidos, el promedio para los hombres es de 176 cm y para las mujeres de 162 cm.