El Indec publicó datos del consumo de marzo que mostraron desplomes extraordinarios, reflejo de la dinámica contractiva del salario mínimo, de los sueldos registrados y de las jubilaciones.

Así, los supermercados registraron una caída de 14,5% en sus ventas, la peor desde que arrancó la crisis. Los autoservicios mayoristas no fueron la alternativa elegida por los consumidores, ya que sufrieron una contracción de 16%. Los shoppings también mostraron una baja de 16,6% en su facturación. La venta de electrodomésticos se derrumbó: negativo de 36,3% en términos reales.

Los pésimos números del consumo se repiten mes a mes y coquetean con el riesgo de volverse una costumbre: las ventas de los supermercados ya apilaron nueve caídas consecutivas, al igual que las de los shoppings. Las consultoras privadas agregaron ayer un factor de análisis nuevo y adelantaron que esa dinámica no se revertirá antes de las elecciones. Se va diluyendo así la perspectiva de un veranito consumidor electoral.

Un informe reciente de Ecolatina afirmó: "El consumo representa más de tres cuartos del PBI. Es fundamental que el poder adquisitivo mejore. De lo contrario, la mejora de la economía será solo una cuestión estadística que se diluirá rápidamente". Y concluyó al respecto: "Recién en 2020 comenzaría a revertirse la caída del salario real formal".

La consultora dirigida por Lorenzo Sigaut Gravina insistió: "Difícilmente la dinámica contractiva se revierta. El poder adquisitivo de los salarios, tanto en pesos como en dólares, continuará deprimido en los próximos meses de 2019, lo que no permitirá recomponer consumo, mucho menos en bienes durables que no son de primera necesidad".

Coincidieron desde ACM: "En los meses próximos las altas tasas de interés junto con los elevados y persistentes niveles de inflación, continuaran impactando en el salario real. Por lo que esperamos que las ventas minoristas sigan mostrando variaciones interanuales negativas muy pronunciadas. En particular creemos que se continuara profundizando la caída en ventas de bienes durables, dado que son aquellos bienes que requieren de financiamiento para su consumo".

Desde LCG coincidieron en que el 2019 terminará en números negativos para el consumo, aunque consideraron que las caídas se irán moderando en los próximos meses. Al similar afirmó el director del CESO, Andrés Asiaín: "Lo que habrá de cara a las elecciones, por las paritarias, los créditos Anses y planchar el dólar, será una amortiguación del deterioro del consumo, en el marco de bajas interanuales".

La contracción continua del consumo se relaciona con la pérdida pronunciada de los ingresos fijos en términos reales. El jueves el Indec publicará la dinámica del salario de marzo, para la cual se descuenta una contracción fuerte. El Ripte publicado la semana pasada por el Ministerio de Desarrollo Social ya registró para marzo una caída real interanual de 10,5%. El salario mínimo una de 15,3% y acumuló otra de 28% en los últimos tres años. Las jubilaciones acumularon una de 10,7%.

El Indec publicó  los datos oficiales de marzo a partir de las encuestas de Supermercados, Centros de compras y Comercios de electrodomésticos. Ese último mostró una mejora de 1,5% nominal. Al deflactarlo por la inflación de bienes publicada por el Indec en marzo, de 59,2%, da una caída de 36,3%.