LA PLATA.- (De la corresponsalía de AGENHOY).- Después de la movilización de más de dos mil personas frente al palacio municipal, ayer, la gestión de Julio Garro se comprometió a crear una comisión que revise los 2.500 contratos que fueron cesanteados por la nueva administración por pertenecer a “personas que cobraban pero no trabajaban”.

La medida se convino luego de que un grupo de delegados y dirigentes provinciales y nacionales del peronismo, la izquierda y el sindicalismo se reunieran con el presidente del Concejo Deliberante, Fernando Ponce, el secretario general del municipio, Javier Mor Roig, y concejales del FpV y del FpV Nacional y Popular.

Los dirigentes opositores encabezaron una movilización junto con sectores de la CTA Provincia y distintas organizaciones, en apoyo a los empleados cesanteados y en rechazo a la represión ejercida el viernes contra un grupo de manifestantes.

En total, a la movilización acudieron unas 2 mil personas que se movilizaron desde las 10 y hasta pasadas las 14.

Estuvieron los diputados nacionales Andrés Larroque, Omar Plaini y Jorge “Quito” Aragón (FpV) y Nicolás del Caño (FIT). Por el mismo frente también lo acompañaba el diputado provincial Guillermo Kane. También estuvieron Miguel Funes y Valeria Amendolara (FpV).

Tardaron más de dos horas en poder ingresar al edificio. Allí, además de ser recibidos, entregaron un petitorio de los trabajadores cesanteados y pidieron su reincorporación. Como contrapartida se prometió revisar esas decisiones, tomadas por el Intendente luego de un exhaustivo análisis de los casos de empleados que figuraban en las planillas pero “no asistían a trabajar y tenían cargos políticos”, estimados, según Garro, en unos “2.500 personas”.

La charla se dio en un clima de fuerte tensión en el palacio de calle 12, porque si bien no se registró ningún incidente, dirigentes políticos y gremiales de la oposición movilizaron a unas 3 mil personas que, pacíficamente, expresaron un fuerte reclamo en la Plaza Moreno.

Participaron en la protesta unas 50 organizaciones. Desde la CTA, Suteba La Plata y el Partido Obrero, hasta Patria Grande, Libres del Sur, ATE, Unidos y Organizados y otras agrupaciones.

La consigna, esta vez, no sólo se relacionaba con las cesantías de los contratos, sino también en repudio por la “brutal represión” sufrida por los manifestantes que el viernes pasado reclamaron en las puertas del municipio, y, tras algunos forcejeos con la Infantería, recibieron gases lacrimógenos y balas de goma, con el resultado de unos 20 heridos.

Ayer, el operativo de seguridad fue diferente. Un vallado de contención fue instalado en la puerta principal del palacio, por la calle 12, y otro en la zona del estacionamiento del Concejo Deliberante, en 11. Nutridos grupos de efectivos de la Infantería formaron parte del operativo, pero, esta vez, del lado de adentro del edificio y, sin contacto con los manifestantes, no hubo que lamentar incidentes.

Los diputados y concejales del FpV que ayer participaron de la marcha ratificaron el pedido de interpelación del ministro de Seguridad bonaerense, Cristian Ritondo, por la represión del viernes e insistieron en rechazar las “maniobras de persecución política y achicamiento del Estado”, al tiempo que denunciaron que “la denuncia de la presencia de los ñoquis es una forma de encubrir despidos masivos”.

En tanto, los bloques de concejales y senadores de Cambiemos expresaron el apoyo a Garro a las medidas adoptadas para “transparentar” el funcionamiento del Estado municipal, e insistieron en reprochar que “quienes gobernaron durante más de 25 años realizaron maniobras que obstaculizan el normal funcionamiento de la Comuna, que van contra el espíritu democrático y que sólo buscan dañar la gestión”, cuestionando que “algunos de los hoy se manifiestan han logrado resultados catastróficos con escándalos de corrupción, déficit económico y problemas de infraestructura y precarización laboral”.

El presidente del bloque de concejales del Frente Renovador, José Arteaga, por su parte, aseguró al respecto que “el Estado no puede seguir manteniendo un sistema clientelar, ya que el dinero de los contribuyentes platenses debe ser usado para el desarrollo de la Ciudad”, y calificó los reclamos como “maniobras políticas”, al tiempo que sugirió sugirió la creación de una mesa donde la representación gremial sea la que audite y defienda la continuidad laboral de los trabajadores.