El monóxido de carbono es un gas venenoso, sin color ni olor, por lo que se lo conoce como "el asesino invisible". Se produce por la combustión incompleta del carbono presente en materiales tales como leña, carbón de leña, gas, kerosene, alcohol, gas oil, nafta.

Cada año mueren unas 200 personas por intoxicación por Monóxido de Carbono, todas ellas prevenibles. La vida media en personas sanas que respiran aire contaminado por monóxido de carbono, varía entre 3 a 4 horas.

El Secretario de Salud del Municipio, Mario Rodríguez y el Director de Defensa Civil, Franco Risso explican las principales causas de este tipo de accidentes, que se intensifican en la época invernal; además de brindar algunos consejos para prevenirlos.

Según un informe de la Dirección de Defensa Civil, en abril se tomó intervención en un total de 16 incendios, en comparación con 8 casos en febrero. ¿A qué cree se debe este aumento? ¿Puede tener relación con la llegada de las bajas temperaturas?

Franco Risso Con la llegada del frio, nosotros estamos trabajando en incendios, que entre un 75% y un 80% son generados por cortos en los sistemas eléctricos, debido a instalaciones precarias. En algunas casas para calentar el ambiente, hacen resistencias muy precarias que provocan cortocircuitos importantes dentro de las viviendas, generando a raíz de eso, un incendio, por el recalentamiento de los cables, que automáticamente se prenden fuego. Las instalaciones precarias se hacen, por ejemplo, con ladrillo común y alambre de fardo.

Con la llegada del frio, ¿las consultas de intoxicación por monóxido de carbono son de las más frecuentes?

Mario Rodríguez Sí, durante los meses de invierno, se reciben en los servicios de emergencias y guardias, un mayor número de casos y consultas de intoxicación por monóxido de carbono. Tienen que ver con sistemas de calefacción que consumen oxígeno y con la posibilidad de no estar ventilando adecuadamente los ambientes.

¿Cuáles son las claves para prevenir este tipo de accidentes?

F.R En primer lugar, si tenemos estufas a gas, tanto a garrafa como natural, es recomendable que los artefactos sean revisados y controlados por un gasista matriculado que va a saber regular la llama para que no genere algún gas que pueda llegar a perjudicar la salud.

A las estufas hay que controlarlas porque al estar seis meses sin usarse, acumulan telas de arañas, suciedad, que hacen que los quemadores funcionen mal y se produzca la intoxicación por monóxido de carbono. Además, hay que observar que la llama de gas sea siempre de color azul,  y no amarilla, que es signo de mala combustión. Todo eso hay que controlarlo, tener los artefactos en buenas condiciones es primordial para que no ocurran desgracias.

También muchas veces vemos que hay malas conexiones de gas o que hay garrafas en el interior de las propiedades, cuando deben estar afuera.

Además, se recomienda tener una ventilación permanente en cada ambiente de la casa. Es fundamental mantener abierta una ventana o puerta en los espacios calefaccionados, para que el oxígeno dentro de la vivienda se vaya renovando continuamente. No se aconseja que la casa esté cerrada herméticamente porque eso provocaría una rápida acumulación de gas dentro de la vivienda y la consecuente falta de oxígeno.

  1. R Lo ideal sería tener un sistema de calefacción que no consuma el oxígeno del ambiente, como puede ser, el tiro balanceado, la calefacción más común, que es por quemado de gas. Las pantallas son una forma muy peligrosa de calefaccionar, otro tipo de elemento que tiene gas sin salida al exterior. Existen artefactos de tipo eléctrico para calefaccionar pero que también entrañan algún otro tipo de riesgo sobre las instalaciones eléctricas o por incendio, cuando, por ejemplo, las instalaciones no son adecuadas.

¿Cuáles son los errores más comunes que se detectan en estos casos?

M.R Suelen suceder durante la noche, que la familia enciende una pantalla o algún elemento de combustión sin una adecuada ventilación. En la noche, sería mejor apagarlos y apelar al abrigo que es la forma más segura.

En su rol como profesional, ¿tuvo alguna intervención en este tipo de emergencias que recuerde especialmente?

F.R Sí, tengo el recuerdo de una intervención en una garita de un personal de seguridad, que estaba haciendo vigilancia en un predio, en un día de mucho frio. Era de noche, el hombre prendió un brasero, puso un balde de fierro, tipo de obra e hizo fuego con carbón. Se metió dentro de la garita, que era de plástico y estaba cerrada herméticamente con este brasero ahí adentro. El hombre se durmió, y penosamente falleció por el monóxido de carbono que inhaló.

M.R Me acuerdo un accidente laboral de un empleado, que cumplía tareas de sereno en una fábrica. El hombre se encerró en un cuarto muy pequeño con una estufa, que si bien tenía tiro balanceado funcionaba mal. Eso es algo que suele pasar, que subestimamos las instalaciones de gas, las estufas de gas no se usan en las épocas cálidas y cuando las prendemos en invierno, suelen tener los picos tapados, por eso hay que acondicionarlas. Y si bien las estufas tiro balanceado tienen un vidrio, éste a veces se rompe, y no se repone. Y la función de eliminar los gases al exterior se pierde, y si uno se queda con esa estufa prendida, comienza a consumir oxígeno de la habitación, y si el cuarto está muy cerrado ahí comienza la intoxicación.

¿Por qué se suele decir que es un “asesino silencioso”?

M.R Porque el monóxido de carbono es un gas que no se ve ni tiene olor. Uno no se da cuenta, no hay un ruido, no hay un momento específico donde el accidente se produzca sino que se va silenciosamente produciendo. Pero es tan peligroso que puede causar la muerte o lesiones neurológicas importantes en algunos casos, si la persona queda sometida muchas horas a una situación de consumo bajo de oxígeno y si además se duerme.

¿Qué se debe hacer ante la sospecha de inhalación de monóxido de carbono?

M.R Ventilar el ambiente y recurrir a un servicio de emergencias médicas, guardias de centros de salud u hospital, o llamar al SUME. Los pacientes suelen quedar algunas horas, y en algunos casos, días internados, depende del tiempo que hayan estado expuesto a la falta de oxígeno.

Síntomas de intoxicación

-Dolor de cabeza.

-Náuseas o vómitos.

-Mareos, acompañados de cansancio.

-Letargo o confusión.

-Desmayo o pérdida de conocimiento.

-Alteraciones visuales.

-Convulsiones.

-Estado de coma.