En 2020 volverá a hacerse un censo nacional (el último fue en 2010, en aquella fecha más recordada como el día que murió Néstor Kirchner) y además de las preguntas de rigor que suelen tomarse en cuenta para la encuesta, en el grupo de las que se incorporan figura la identidad de género autopercibida.

Quien destacó el hecho fue Martín Canevaro, Secretario General y activista de 100% Diversidad y Derechos, organización que trabajó junto al INDEC para esta incorporación.

De esta manera en gran parte se ayudará también a visibilizar a las familias LGTBI+ que pueblan la Argentina, así como también la comunidad trans y travesti. La idea de base es que el Estado planifique políticas públicas integrales.

El censo nacional será el 28 de octubre del año que viene. Diez años atrás uno de los ítems del cuestionario incluía el dato de si en el hogar en cuestión había parejas de lesbianas, gays o trans. Sin embargo, en esta se va más allá con el agregado de la autopercepción.

El año que viene a los y las censadas se les respetará su nombre y género, indicando el sexo que deseen más allá de lo que diga el DNI.

El dirigente remarcó que "la inclusión de la identidad de género en el próximo censo es un avance histórico". Y agregó: "Junto a la continuidad de la publicación de datos sobre hogares compuestos por parejas del mismo sexo y sus hijes, que comenzó en 2010, expresa la adecuación de las políticas censales al paradigma igualitario consagrado en la legislación de nuestro país y en la jurisprudencia internacional de los derechos humanos".

En ese sentido, subrayó que "con eso podremos acceder a datos cuantitativos, cuántas familias LGBTI+ y personas trans hay en la Argentina, cantidad de hijes, ubicación, edades, origen, etc. Y el cruce de esos datos con el resto de las variables, principalmente en el caso de la población travesti-trans, será un insumo muy valioso que nos permitirá reclamarle al Estado políticas públicas focalizadas de reparación e inclusión".