*Por Jorge Joury

Hasta las arenas calientes de Pinamar, llegaron los ecos de la rosca política del PJ en Costa del Este. La explosión de euforia de intendentes y legisladores que fueron a la cumbre celebrada en el hotel boutique Almarenas, fue la comidilla que alimentó las charlas playeras.

No es para menos, allí se dieron las primeras puntadas para confluir en una alianza entre el PJ y el Frente Renovador. El desafío más grande a futuro, es tener en la cancha un candidato a gobernador a más tardar en abril. El potencial de ambas fuerzas no es para nada despreciable. Tienen 35 intendentes peronistas y 11 massistas. Es un número importante para presentarle batalla a María Eugenia Vidal, que será el tanque de guerra de Cambiemos en las elecciones generales del año próximo.

El cónclave congregó a más consejeros de los que se esperaba. Fueron 40 de 48. El ex intendente de La Matanza Fernando Espinoza y su sucesora, Verónica Magario, faltaron con aviso en medio de cuestionamientos al nuevo presidente del partido el intendente de Merlo, Gustavo Menéndez. Ambos habían anunciado la ausencia masiva del kirchnerismo, que finalmente no se concretó. Aunque son minoría, referentes de ese sector como el intendente de Moreno, Walter Festa, dieron el presente convencidos que hay que buscar una propuesta superadora frente al oficialismo.

La sorpresa vino de la mano del dirigente sindical Roberto Baradel, que se sumó a la reunión pese a no integrar el consejo del PJ. Alineado con el kirchnerismo, el jefe docente del Suteba llamó a Menéndez para pedirle participar. Habló antes de que el consejo empezara a sesionar y fue invitado a quedarse, aunque declinó la oferta señalando : "Tengo otros compromisos".

Baradel expuso su preocupación por los "riesgos" de la reforma del Instituto de Previsión Social (IPS) de la provincia que planea el gobierno de María Eugenia Vidal. También les agradeció a los intendentes que, ante la falta de asistencia de la Nación, se hagan cargo de arreglar las escuelas.

"Estuvo bien, muy medido. Y la mención a las escuelas cayó bien entre los intendentes", manifestó uno de los presentes.Se tomó a la participación del líder del Suteba como un gesto de "apertura" y una prueba de que el partido intentará "incluir a todos".

Algo de eso reiteró el camionero Pablo Moyano, que esta semana ya había incluido a Cristina Kirchner en la reconstrucción del partido. "El Gobierno viene por los convenios colectivos", advirtió el hijo de Hugo Moyano en alusión a la reforma laboral. Y remató: "Es momento de estar todos juntos". Destacó además la necesidad de que la marcha convocada por su gremio para el 22 de febrero "sea lo más grande posible".

El Pj bonaerense expuso sus críticas en un documento de siete páginas, con el título "Es tiempo de construir una esperanza" y con cita del Papa incluida. El andarivel de hechos a los que se condenó fueron desde los tarifazos, la inflación y la reforma previsional descripta como "un robo a los jubilados" . También se centró la inquietud en torno a la reforma laboral, la "desvalorización" del salario y la "inconstitucionalidad" del último megadecreto de Macri.

"Le decimos no a la reforma laboral que beneficia únicamente al sector patronal y esconde un retroceso en materia de derechos, precarización y el empeoramiento general de las condiciones de trabajo", señaló el documento en uno de sus párrafos más coyunturales.

La parte más dura arranca con un verdadero cañonazo contra el Gobierno. "Venían a 'unir a todos los argentinos' y promueven el odio, la división y la persecución política y judicial. Y enseguida agregaron: "Repudiamos las presiones sobre la Justicia para que avancen con mayor celeridad causas a políticos en función del partido al que pertenecen".

Antes de las conclusiones, todas vinculadas con la "unidad" y el llamado a "privilegiar las coincidencias en la doctrina justicialista por sobre las diferencias coyunturales", aparece la mención a Cristina. "Perón y Evita marcaron el camino. Demostraron que otra Argentina era posible. Con Néstor y Cristina vimos ese legado en el gobierno", concluyeron los consejeros.

La reunión sirvió además para oficializar la convocatoria al próximo congreso partidario. Será el sábado 3 de marzo "en lugar a designar". Está vigente un acuerdo para que Espinoza presida esa cumbre.

En materia política, lo más significativo fue el acercamiento con el massismo, lo cual desatará seguramente la ira de Margarita Stolbizer, dispuesta a abandonar la alianza 1País ante cualquier posible acercamiento al kirchnerismo.

Un hombre cercano al Frente Renovador señaló que "tampoco la presencia de ella nos ha sumado como para que tengamos que postergar una carta de unidad como la que se presenta".
El plan del peronismo de aunar fuerzas con el espacio de Massa tiene como pata fundamental un requisito de difícil cumplimiento: Que Cristina Kirchner acompañe el proceso en relativo silencio y no busque protagonizar la campaña.

Por lo que pudo saberse en fuentes confiables, Massa que se encuentra en Nueva York, dio el visto bueno a la hoja de ruta y mandó a decir que lo esperen para avanzar con el armado. Además, el tigrense atendió los llamado de unos diez intendentes que se mostraron interesados en la propuesta.

En lo que tiene que ver con el posible candidato a la gobernación, el nombre aún no está, pero si el perfil buscado. La mayoría quiere replicar el estilo Vidal. Es decir, una persona que tenga muy baja la imagen negativa, no importa si es conocido porque tendrá tiempo para crecer y que no tenga pasado o causas judiciales que se convierta en un blanco fácil para el gobierno.

Los intendentes peronistas quieren para ese desafío al propio Massa o a Felipe Solá. Pero hay quienes sostienen que el tigrense apunta a la pelea nacional y que propone como candidato a gobernador a Daniel Arroyo, un referente clave en políticas sociales del Frente Renovador. Moderado y de perfil técnico, Arroyo tiene el respaldo del Movimiento Evita y le entusiasma la idea. En cuanto a Solá, se pusieron sobre el tablero algunas ventajas y desventajas. Tiene altísimo nivel de conocimiento, pero al mismo tiempo posee la imagen negativa muy alta. En una campaña dura, puede ser sindicado como parte del pasado, aunque alguna vez Vidal lo mencionara como el mejor gobernador bonaerense, ninguneando al radicalismo.

Tampoco hay que descartar en ese esquema a Martín Insaurralde, aunque el intendente de Lomas de Zamora puso como condición que sólo competiría por la gobernación si es que el peronismo tiene asegurado el triunfo.
Lo que quedó en claro tras el cónclave, es que al candidato hay que construirlo, instalarlo con tiempo como Macri hizo con Vidal. También hay que destacar que alguien tiró sobre la mesa el nombre de Florencio Randazzo, sin embargo las críticas fueron unánimes y demoledoras.

El único rechazo explícito fue hacia Randazzo acusado de haberse convertido en un dispositivo de Macri y Vidal para que el peronismo perdiera en las elecciones de octubre.
Todos coincidieron en que la candidatura del ex ministro fue parte de un dispositivo del gobierno para que pierda el peronismo. Curioso, quienes más cuestionaron a Randazzo fueron los intendentes del interior que son los que llevaron la boleta del fracasado Cumplir. Es que fueron ellos justamente quienes se sintieron usados en una operación diagramada por el gobierno. "Ya todos sabemos de las reuniones de Florencio con Salvai y como le financiaron la campaña", disparó con indignación uno de los presentes.

El mayor dilema del posible armado, es qué hacer con Cristina Kirchner. En principio lo que se conversó fue ignorar tanto a la ex presidenta como al kirchnerismo más rancio. "Con el peronismo unido y con Cristina callada, no hay segundo mandato de Macri", señalaron la mayoría de los presentes. Los dirigentes creen que frente al desgaste del Gobierno y sus desaciertos en materia económica, poner en marcha un peronismo fuerte en la provincia es la llave para avanzar sobre el interior del país y ganar la presidencia.

En el PJ coinciden en que Cristina es funcional al Gobierno cuando sale a agitar las aguas .Lograr que no se mueva de su banca será una verdadera epopeya, aunque los milagros existen cuando se trata de recuperar el poder. En Pinamar, algunos dirigentes se preguntaban si : ¿La próxima foto del verano será la de Cristina-Massa?. Por el momento, nadie se anima a desmentirlo.

*Jorge Joury es licenciado en Ciencias de la Información, graduado en la UNLP y analista político. Su correo electrónico esjorgejoury@gmail.com. Si querés consultar su blogs, podés dirigirte al sitio: Jorge Joury De Tapas.