Por Jorge Joury, desde Pinamar

El peronismo produjo la primer foto política de alto impacto del verano. Algunos sostienen que es un paso importante hacia la unidad. La movida, que ya es la comidilla en las carpas, tiene que ver con que hace pocas horas, el líder de 1País, Sergio Massa, recibió en su casa ubicada en la zona de La Herradura, al presidente del PJ bonaerense y actual intendente de Merlo, Gustavo Menéndez.

La reunión estaba planificada desde diciembre, pero se mantuvo en el mayor de los secretos para evitar la presencia de periodistas. El cónclave duró más de tres horas, de las 20 a las 23:30. En el entorno del tigrense señalaron al encuentro como un principio de acuerdo para trabajar juntos en temas sensibles de la agenda y marcarle la cancha al oficialismo. No obstante, existe un obstáculo en el camino: para Massa, el límite es Cristina Kirchner, con quien Menéndez por ahora no está dispuesto a romper.

Entre los temas que surgieron en la mesa de la coqueta casa que el ex diputado nacional comparte con su esposa Malena, sus hijos, y un matrimonio amigo, entre gaseosa y gaseosa, se habló de la ofensiva judicial contra la reforma jubilatoria, considerada por la oposición como un ajuste en el haber mensual del sector pasivo.

Los dirigentes discutieron también sobre la posibilidad de impulsar políticas para fortalecer la transparencia en los municipios. Massa apunta para ese rol a un instituto dirigido por Margarita Stolbizer, principal denunciante de CFK. En cambio Menéndez piensa en organizaciones sociales vinculadas al papa Francisco.

Donde hubo más coincidencias, fue en plantear una estrategia común contra la reforma laboral que el Gobierno planea discutir en sesiones extraordinarias en el Congreso, en febrero.
El alcalde de Merlo se manifestó optimista. Estima que el encuentro puede transformarse en el primer paso para un retorno "paulatino" del fundador del Frente Renovador al PJ. "Todos tenemos ganas de confluir en un mismo espacio y el peronismo es el espacio aglutinante", aseguró. También señaló que "Sergio armó un espacio importante, pero entiende que necesita ser parte de un esquema mayor porque en la polarización se lo come la pelea de los elefantes".

El nuevo jefe del PJ bonaerense por el momento no mostró intención de distanciarse de Cristina Kirchner, ya que hizo campaña por ella en las últimas elecciones. Sin embargo, busca puentes para que la presencia de CFK no sea un obstáculo para contener a otros referentes como Massa, Florencio Randazzo y Juan Manuel Urtubey, entre otros.