El director ejecutivo de la UIA, Diego Coatz, planteó que el gobierno de Alberto Fernández deberá estabilizar el dólar para traer mayor "previsibilidad", pero remarcó que para detener la inflación debe evitar fijar el valor de la divisa estadounidense, como sucedió en la convertibilidad del ex presidente Carlos Menem.

"Este que tenemos hoy es en términos de la media histórica argentina un dólar alto. El problema es que la inflación también es muy elevada, entonces siempre los programas de estabilización incluyen un ancla y generalmente ese ancla es el tipo de cambio", analizó Coatz.

En este sentido, subrayó: "Creo que el gran desafío es que el tipo de cambio se estabilice pero que no se ponga fijo como único elemento antiinflacionario".

Desde la visión del dirigente de la UIA, el dólar está "alto y refleja el resultado comercial". "Tenemos un resultado comercial muy alto, no obviamente por las exportaciones, sino porque cayó mucho el consumo en inversión, se encarecieron mucho los bienes importados", sostuvo.

"Lo importante es traer previsibilidad, que el tipo de cambio no se atrase un año 40%, como en 2017, pero tampoco necesariamente que se devalué un 40%, porque si no, no se pueden planificar los cotos en dólares", dejó en claro Coatz.

Sobre esto, expuso que "la industria que invierte a largo plazo necesita certidumbre y es lo que no hemos logrado en los últimos 8 años, y en particular los últimos dos". Por esto, la agenda de más corto plazo es la "estabilización de las variables principales, hay que ajustar y terminar de ordenar esquemas de controles cambiarios".

En segundo término, consideró que es necesaria la "renegociación de la deuda y la cuestión fiscal para que baje el riesgo país", y, en tercer lugar, destacó la necesidad de corregir "todo el tema financiero para poder bajar la tasa de interés y que se reanime el circuito de crédito".

 "Argentina necesita el año que viene un tipo de cambio oficial y comercial que marcan los precios y la tasas de interés estén en niveles estables. A partir de lograr eso, la inflación va a ir reduciendo y se podrá pensar en que mejore el consumo y la actividad económica. Es una primera agenda de estabilización, una segunda de etapa de crecimiento", analizó.

En este sentido, el directivo de la central fabril indicó: "Tenemos que lograr que se recupere la economía pero que esa recuperación sea sostenible y no incluya inconsistencias que nos lleven a una futura devaluación y un futuro ajuste y aumento de la tasa de interés. Esta agenda es estabilizar muy de corto plazo y después lograr la recuperación y crecimiento económico".

Coatz también se regirió a las tensiones que, por sus fuertes cruces de palabras, se vislumbran a futuro en la relación que tendrán como pares el presidente brasileño Jair Bolsonaro y Alberto Fernández, cuando éste asuma a su cargo.

"Más allá de las declaraciones y estas tensiones, va a primar la relevancia comercial, política y cultural entre ambos países. Los pueblos están muy hermanos y las relaciones comerciales y productivas son muy importantes", consideró el dirigente, luego de que Bolsonaro afirme que no asistirá a la ceremonia de asunción de Fernández.

Sobre el rol de la UIA, agregó que "los actores involucrados en la producción tenemos que colaborar para buscar espacios comunes de diálogos entre los respectivos gobiernos".