La planta, elaborará raciones de un guiso de alta calidad nutricional destinado a sectores vulnerables de la región. La iniciativa contribuirá a disminuir la inseguridad alimentaria y mejorar la calidad de vida de quienes hoy se encuentran excluidos o postergados.

La UNLP se convertirá así en la primera Universidad pública del país que contará con un proceso de deshidratado de vegetales y un laboratorio de control de calidad de materias primas, insumo final y efluentes. Se estima que la planta estará en pleno funcionamiento en el último trimestre del año.

El producto principal será una mezcla deshidratada con arroz, carne, lentejas y verduras de producción local que las familias podrán cocinar en sus propios hogares. “Tendrá como valor agregado poder retomar la práctica de almorzar o cenar en el seno familiar, y que la gente deje de tener el comedor comunitario como única alternativa”, dijo el presidente  de la UNLP, Fernando Tauber.

El proyecto fue concebido como una instancia multisectorial para planificar acciones continuas para el desarrollo productivo y la recuperación de los derechos esenciales de la comunidad, y a la vez enriquecer a la Universidad en sus actividades de docencia, investigación y extensión, con el aporte de todos los sectores sociales.

La idea es trabajar con los productores del cordón hortícola de La Plata y utilizar aquel excedente de cosecha o producción que no se haya vendido para elaborar el alimento deshidratado. Los responsables del proyecto adelantaron que, en un principio, se elaborarán y empaquetarán raciones para cuatro personas –de unos 400 gramos aproximadamente-, aunque se prevé que en el futuro ofrecerán presentaciones de hasta doce porciones.

En cuanto al modo de preparación, se explicó que el producto saldrá condimentado y saborizado. Las familias sólo deberán hidratar las raciones y luego cocinarlas al fuego en una olla. La formulación de los alimentos incluirá carbohidratos, proteínas, lípidos (aceite vegetal), vitaminas y minerales, en proporciones recomendadas por médicos nutricionistas de la Universidad.

El 5 de marzo, la UNLP llamará a licitación para la construcción de la planta, que tendrá una superficie cubierta superior a los 1.100 metros cuadrados. Funcionará en el predio de 60 hectáreas que posee la Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales, en la calle 66 y 167 de la periferia platense.

En tanto, desde el Rectorado de la Universidad platense, las autoridades ya gestionan la adquisición de la maquinaria, que incluye un deshidratador SBN-10 con capacidad para deshidratar una tonelada de alimentos. En el predio también funcionarán laboratorios de control de calidad, y se dispondrá de un amplio sector de aulas para tareas de docencia y extensión.