Más de 7 millones de trabajadores y trabajadoras están desprotegidos, el 43% son no registrados, el 37% cuentapropistas y 20% desocupados.

Así lo establece un informe de la fundación Atenea sobre la base de la Encuesta Permanente de Hogares del INDEC al segundo trimestre de 2019. Es el sector más vulnerable a las consecuencias económicas de la pandemia.

El Gobierno anunció este lunes un pago excepcional de 10.000 pesos para monotributistas e informales. Las estimaciones oficiales dan cuenta de que el beneficio llegará a 3,6 millones de hogares.

"En el contexto excepcional de pandemia que estamos atravesando, y luego de cuatro años de profundo ajuste, con aumento de los índices de desocupación, informalidad, y trabajo por cuenta propia como respuesta a una situación de crisis, resulta indispensable focalizar el análisis coyuntural en una población que ha crecido cuantitativamente al tiempo que ha profundizado su vulnerabilidad económica y social", señala el informe de Atenea.

Son trabajadores que no tienen acceso a licencias con goce de haberes, por lo cual pierden la posibilidad de generar ingresos toda vez que no puedan realizar sus actividades con normalidad.

En el marco de un contexto recesivo, sus fuentes de empleo sufrirán mayor inestabilidad, lo cual vuelve a este grupo de trabajadores fuertemente dependiente de una economía activa y de la circulación y consumo de la población, tal como confirmó Guzmán.

Los más afectados son quienes trabajan por cuenta propia y principalmente, lo realizan en la calle o espacios públicos.

La falta de ocupación o registración implica en la mayoría de las ocasiones la falta de acceso a cobertura de salud, que se adiciona a las complicaciones que supone el estar expuesto a una enfermedad sin la posibilidad de tener licencias.

La tasa de no registración en los trabajadores mayores de 60 años, considerados grupo de riesgo, alcanza el 44 por ciento, profundizando las condiciones de exposición y fragilidad de más de 300 mil personas que se encuentran en estas condiciones, según el informe de Atenea.

Los cuentapropistas representan el 36,9 por ciento. Este grupo es marcadamente heterogéneo, dado que puede albergar desde profesionales de clases medias y altas, hasta trabajadores de la economía popular, quienes por el tipo de actividades que realizan no pueden continuar desarrollando sus actividades de manera remota como algunos profesionales.