“Argentina puede evitar la reestructuración de sus bonos si los funcionarios revierten a tiempo las medidas de austeridad que sofocan el crecimiento para estimular el crecimiento económico y eludir una crisis de deuda”, expresó el economista estadounidense ganador del premio Nobel

Joseph Stiglitz cuestionó el programa adoptado por el gobierno de Mauricio Macri para acceder al financiamiento del FMI. “Creo que es inequívocamente probable que Fernández tenga una mejor política”, consideró Stiglitz al cuestionar la orientación económica elegida a lo largo de los últimos cuatro años por la administración de Cambiemos.

“El problema es que las políticas a las que se había comprometido el Gobierno no conducían al crecimiento económico”, consideró Stiglitz durante una entrevista realizada con la agencia de noticias Reuters. “La austeridad y los presupuestos ajustados conducen a un bajo crecimiento y eso hace que la deuda sea menos sostenible”, expresó el profesor de la Universidad de Columbia.

Consultado sobre la probabilidad de éxito de un cambio en la política económica con la llegada de un nuevo gobierno, Stiglitz advirtió que “si es suficiente para evitar una reestructuración de deuda depende de cuán profundo sea el agujero que Macri cavó en los últimos tres años y medio”. El ex economista jefe del Banco Mundial cuestionó además el ritmo del endeudamiento externo asumido a partir de 2016. “Macri comenzó con una pizarra casi limpia y pidió prestado demasiado. Apostó en grande y apostó mal”, consideró al referirse a los escasos niveles de deuda heredados de la administración kirchnerista.

Stiglitz cuestionó con énfasis los programas de recorte del gasto público que a partir del recambio presidencial y, en especial, desde el regreso del FMI, volverían a implementarse en Argentina. "El ajuste en recesión genera catástrofes sociales. La austeridad fiscal en momentos de recesión, cuando el sector privado también está reduciendo el gasto, solo agrava el escenario contractivo”, sostuvo entonces el economista.

Stiglitz sigue de cerca todo lo que sucede en la economía argentina. A lo largo de los última década, el economista recurrió a la experiencia del país post crisis de 2001-2002 para mostrar la existencia de estrategias macroeconómicas alternativas al ajuste. “Argentina tiene mucho que enseñarle al resto del mundo en materia de resolución de crisis macroeconómicas y reestructuración de deudas soberanas. La forma en que resolvió su crisis de 2001-2002 condujo al alto crecimiento que se observó hasta el año 2008. Argentina ha sido uno de los pocos países exitosos a la hora de reducir la desigualdad y la pobreza después de la crisis", expresó hace tres años. Desde entonces ha sido un duro crítico de las medidas económicas del gobierno de Macri.