La Corriente Convocatoria Socialista del Partido Socialista Bonaerense se solidarizó con las familias damnificadas por los créditos UVA y manifestó su apoyo al colectivo denominado Hipotecados UVA Autoconvocados, en particular al grupo de la Provincia de Buenos Aires que viene haciendo un gran trabajo de reclamo y difusión de las consecuencias.

“Cuando el gobierno lanzó esta idea de otorgar créditos en Unidad de Valor Adquirido (UVA), que indexa por inflación, impulsó a la gente a tomar este tipo de deuda bajo la promesa de que la inflación bajaría y que, en todo caso, acompañaría al salario”, señalaron en un comunicado firmado por Gabriela Troiano, Henry Stegmayer, Alexis Dritsos  y  Luis Portelli.

En esa línea, dijeron que nada de esto ocurrió y que luego de tres años del lanzamiento del sistema, “el fracaso de los créditos UVA se traduce en miles de familias que ya no saben cómo hacer para pagar las cuotas, problema que se profundizó especialmente en 2018, año en que los precios se aceleraron con respecto a la evolución de los salarios”.

El capital indexado llevó a que casi 170.000 familias tengan dificultades serias para continuar pagando en estas condiciones, ya que corren un certero riesgo de perder su vivienda en poco tiempo.

El gobierno anunció en tres oportunidades que tomará medidas para aliviar la situación de los tomadores de créditos: en diciembre, abril y recientemente en julio, pero ninguna se ha hecho efectiva.

“La realidad es que no resultan suficientes y carecen de la profundidad y seriedad que requiere una solución definitiva a este problema”, criticó el socialismo.

La propuesta del gobierno es rechazada por insuficiente ya que mantiene el sistema indexatorio de UVA vigente. El ‘alivio’ termina en diciembre de 2019, se utilizan fondos públicos de otros destinos para la compensación y, al realizar los cálculos según el esquema de compensación planteado, se verifica una compensación insuficiente en relación a los incrementos de cuota observados.

“Por esta razón sumamos nuestro reclamo al Gobierno nacional y señalamos que la solución definitiva a este problema requiere la eliminación definitiva del sistema UVA y la reconversión de todos los préstamos a un nuevo sistema que garantice la posibilidad real de cumplimiento de los deudores. El nuevo sistema tiene que ofrecer el equilibrio entre ingresos, cuota y  actualización del capital en el contexto real de la economía”, solicitaron.

Para concluir, señalaron que “la gravedad de la situación merece que se tomen medidas urgentes en lugar de apelar a golpes de efecto mediático que en nada cambian la realidad que padecen las 170.000 familias afectadas”.