LA COLUMNA DE DR. MUSSO

El calor, ya sea en forma directa o indirecta, puede producir en el organismo alteraciones patológicas de importancia, que constituyen la llamada “enfermedad del calor”.
Estas alteraciones se deben a la acción de las altas temperaturas y la humedad del ambiente.
Cuando son producidas por la acción directa del sol se llaman “insolación” y cuando se deben a la acción indirecta del sol se llaman “golpe de calor”.
El ser humano regula su temperatura mediante un mecanismo interno, que le permitemantenerla constante; dicha regulación la realiza mediante el equilibrio entre dos funciones: la termogénesis y la termólisis.
Termogénesis es la producción de calor por el organismo y termólisis es la pérdida de calor del organismo por radiación, secreción, sudoración. La falla de estos mecanismos lleva al aumento o la pérdida de calor del organismo.
El golpe de calor es la falla de la termólisis provocando el aumento de la temperatura del cuerpo. Puede producirse por irradiación solar o fuentes de calor artificiales.
Lo más común es que se produzca al aire libre, pero también puede producirse en lugares cerrados.
Las causas que favorecen el golpe de calor son las altas temperaturas, el calor húmedo, la insuficiente ventilación, el viento cálido, las ropas oscuras, ajustadas y de abrigo, la ropa impermeable, las aglomeraciones en lugares de poca ventilación y capacidad.
La sudoración es importante, porque alivia los síntomas, que en orden de importancia son:
POSTRACIÓN con debilidad, falta de apetito, dolor de cabeza, vómitos y diarrea.
AGOTAMIENTO con baja presión arterial, y pulso acelerado.
GOLPE DE CALOR donde los síntomas anteriores se magnifican, aumentando la temperatura y puede perderse la conciencia.
TRATAMIENTO: acostar al paciente, con la cabeza más alta que el cuerpo. Enfriar al cuerpo con bolsa con hielo, paños húmedos, ventilar el cuerpo apantallándolo o colocándolo cerca de un ventilador. Darle líquidos.
Cuando la temperatura ambiental predispone a sufrir un golpe de calor, hay que aplicar NORMAS PROFILÁCTICAS: Disminuir la actividad física, ingerir líquidos, usar vestimenta holgada, de colores claros, usar sombrero que proteja la nuca del sol, consumir alimentos de pocas calorías,(frutas y verduras), realizar tareas preferentemente al atardecer.
Quienes más expuestos están a padecer enfermedades por el calor son los niños y las personas de mucha edad. Los ciudadanos deben evitar realizar trámites en horas de más calor y trabajar en ambientes protegidos del calor.
Hay que aprovechar la tecnología, para que las enfermedades del calor, no formen parte de las “enfermedades profesionales”.