Varios barrios de la ciudad de La Plata se encuentran sin servicio eléctrico desde el último sábado. El apagón masivo afectó a más de 18 mil usuarios de la empresa EDELAP, a cargo de un empresario cercano a la gobernadora María Eugenia Vidal, Rogelio Pagano, que también controla el mercado energético del norte y sur de la provincia de Buenos Aires.

En este contexto, llama la atención nuevamente el silencio de la gobernadora bonaerense que, ante cada conflicto o problemática en la Provincia, como fueron el escándalo de los aportantes truchos o las inundaciones del año pasado, cuenta con el blindaje mediático producto de la pauta millonaria de su gestión en los medios con mayor alcance.

A pesar de los significativos aumentos de las tarifas de los servicios públicos habilitados durante su gestión, que implicaron ganancias millonarias para las empresas que deciden volcarse a la timba financiera en lugar de llevar a cabo un plan de inversión, el gobierno de María Eugenia Vidal, al igual que el presidente Mauricio Macri, no implementa los controles necesarios para la mejora del servicio eléctrico.

La situación no es nueva y ya ha afectado en reiteradas ocasiones a distintos puntos de la provincia de Buenos Aires. Incluso, la gobernadora no generó ningún tipo de respuesta ante una situación límite que se vivió este año en el hospital San Martin, donde un corte de luz por más tres horas, y con los generadores en mal estado, provocó que los médicos tuvieran que asistir a pacientes bebés en forma manual y con las linternas de sus celulares.

Como en aquella situación crítica que puso en evidencia el desfinanciamiento de la salud pública, la candidata de Macri en la Provincia vuelve a elegir el silencio ante las problemáticas que afectan a distintos sectores de la sociedad.