* Por Jorge Joury

Los operadores políticos saben que se avecina una campaña sucia, plagada de golpes bajos y violencia callejera. Tal vez sea la más oscura de las últimas décadas. Frente a este escenario, lo que más preocupa a nivel bonaerense, es la seguridad de la gobernadora María Eugenia Vidal, la joya más preciada de Cambiemos. La pregunta es más que obvia: ¿Está bien custodiada?. Pareciera que nó. Muchos se preguntan si el incidente que le tocó vivir el lunes pasado en Mar del Plata, cuando un hombre logró sortear los controles y se puso cara a cara con ella, no será motivo suficiente para extremar los cuidados.El episodio se registró mientras la mandataria provincial participaba del acto por la reinauguración del servicio de trenes de Buenos Aires a la ciudad balnearia.
Si bien rápidamente esta persona fue retirada por los miembros de la custodia, quedó al descubierto la facilidad con que logró acercarse a Vidal. Fue en el momento cuando acompañada por el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, bajaron de la formación e iban a hablar con la prensa.
El hombre, de unos 50 años, se acercó con los brazos en alto y le entregó un papel a la gobernadora. No obstante, llegó saltando la valla, sin que nadie lo impidiera. Por lo menos, Vidal debería tener dos anillos de seguridad para frenar cualquier situación extrema.
Al parecer, la persona en cuestión tiene las facultades mentales alteradas y le habría pedido ayuda, antes de ser detenido por averiguación de antecedentes. Del tema no se volvió a hablar, pero en el Ministerio de Seguridad trascendió que hubo varios tirones de orejas para la custodia. Lo grave, es que el hombre se habría hecho pasar por periodista y se ubicó en el corralito para la prensa. Se acreditó, pero no le pidieron ninguna credencial y así logró filtrarse. Bien pudo haber sido un sicario. ¿Y si pasaba lo peor?. La seguridad de un gobernador debe ser una cuestión de Estado y no se pueden dejar flancos débiles.
Menos, cuando Vidal está poniéndose al hombro la campaña bonaerense, tratando de proyectar su buena imagen sobre los candidatos de Cambiemos. No debe perderse de vista que ha sufrido constantes amenazas por parte de la denominada "maldita polícía", a raíz de las constantes purgas y del propio Servicio Penitenciario, por haber pateado los nidos de corrupción.
Además, hay que tomar nota que una posible venganza del narcotráfico, es otra de las pesadillas pendientes. El año pasado la mafia que maneja el negocio de la droga quemó un juzgado federal en una de las zonas más calientes del conurbano y dejó un mensaje atemorizante: "Vidal andate de San Martín".
Las situaciones enumeradas, han hecho que la mandataria tuviera que mudarse con su familia meses después de haber asumido, a la Base Aérea de Morón para estar más segura. También sufrió amenazas de muerte telefónicamente y no es poco que los policías que la cuidaban en la gobernación, tuvieron que ser dados de baja, al ser descubiertos revisando los cajones del escritorio en su despacho.
El ministro Federico Salvai, una de las primeras espadas del gobierno, también fue blanco de intimidaciones, cuando desconocidos penetraron en su residencia y revolvieron todo sin llevarse nada. Todo forma parte de una sucesiva y siniestra cadena de hechos que obligan a reforzar al extremo la seguridad de Vidal.
Aunque se trate de una mujer valiente y de mano firme, la gobernadora admitió que vive con miedo. Lo hizo al realizar un balance de 18 meses de gestión, durante una entrevista que concedió a la ex integrante de la Conadep, Graciela Fernández Meijide, en el ciclo Cada noche, que emitió la TV Pública. "El miedo es una señal de que uno es consciente de lo que enfrenta. Las amenazas sobre la seguridad de mi familia generan un miedo. "Uno toma la decisión por uno, pero compromete a todo lo que lo rodea: mis hijos, mis padres…", explicó.
Señaló que también siente temor por "no poder hacer lo suficiente" como gobernadora. "Todas las noches cuando me voy a dormir hago un repaso del día y siempre pienso qué hice de concreto hoy por alguien". "Cuando el saldo no me da positivo, empiezo a cambiar las cosas", dijo.
Al evaluar sus logros, dejó en claro que "doy la pelea contra la corrupción en las fuerzas de seguridad en la Provincia. No estoy dispuesta a negociar con ellos, porque creo que ese modelo fracasó. Lo único que hubo fue más inseguridad a lo largo de los años", explicó. Y remató: "Dejar que las fuerzas se autorregularan y mirar para otro lado o llevarse una parte de la recaudación solo dañó más a los bonaerenses".
También hay que poner énfasis en que la seguridad es uno de los puntos débiles de Cambiemos, sobre todo ante los peligros que acechan en las calles durante los actos y timbreos de los funcionarios. Los escraches que recibió en numerosas oportunidades el presidente Mauricio Macri, que comenzaron en sintonía con el inicio de la gestión pero que se intensificaron entrado el año electoral, encendieron también las alarmas. Un ejemplo tuvo lugar durante los últimos días de diciembre de 2016, cuando el mandatario fue agredido con piedras mientras se trasladaba a un acto en la localidad de Villa Traful, en Neuquén.
Luego de ese incidente, el Gobierno resolvió apurar el acondicionamiento de una camioneta blindada Mercedes Benz modelo Vito. Pero mientras se pone a punto el nuevo vehículo oficial, el mandatario sumó un nuevo blindado, una Toyota SW4 gris.
También se decidió un triple anillo de custodia. El primero, controlado por el jefe de la Casa Militar. El segundo, por las fuerzas de seguridad federales, ya sea PFA, Gendarmería o Prefectura, de acuerdo al lugar. El tercero por las fuerzas de seguridad locales.
No hay que pasar de lado en la linea de temores, que hace una semana un individuo a bordo de un Renault 19, logró sortear las vallas y llegar hasta la puerta de entrada a la Casa Rosada. Se señaló que estaba drogado y con alteraciones mentales, pero bien pudo haber sido un terrorista de Isis con un auto cargado de explosivos y hoy estaríamos frente a un escándalo mundial. Son todos llamados de atención que deben ser corregidos, antes de que sea tarde, ya que los enemigos llegan por el lugar menos esperado.

*Jorge Joury es licenciado en Ciencias de la Información. Su correo electrónico es jorgejoury@gmail.com. Quienes quieran consultar sus artículos, pueden dirigirse al blogs: Jorge Joury De Tapas.