Un informe del Centro de Economía Política Argentina (CEPA) sobre conflictividad laboral y social reveló que el año pasado se registraron 778 paros de actividades en la Argentina, lo que representa el 34% del total de las 2.265 acciones de protesta laboral.


Según esas estadísticas, poco más de la mitad (53%) fueron huelgas activas con movilización. (53%). Mientras que la mayoría de los paros (65%) se realizaron en el ámbito público, el 62,5% de los cortes de ruta y calles lo protagonizaron trabajadores privados.
Si a estos datos se le suman los registros de las protestas sociales, que en 2017 acumularon 1.709 acciones en particular, el conjunto los hechos de conflictividad social y laboral sumaron 3.974 durante todo el 2017. "En promedio, representaron 331 protestas mensuales y 11 protestas por día en todo el territorio nacional", afirmaron desde el Centro.
En la cima de los motivos se ubican las protestas por salarios (paritarias, reducción, atraso de pagos, incumplimiento de acuerdos), con el 44% del total de las quejas laborales. Le siguen los despidos (25%), las condiciones laborales (12%), las luchas "contra las políticas de ajuste" (10%), la persecución sindical y, por último, las crisis de las economías regionales.
La inconformidad salarial se expresó en el Estado por un insistente el reclamo de reapertura de paritarias, mientras que en el sector privado la mayor causa de la queja fue el "atrasos en los pagos de salarios
La representación gremial en los conflictos fue mayor para los estatales. Durante 2017, poco más de 7 de cada 10 conflictos laborales contaron con la participación de los sindicatos, tanto del sector público como privado. Pero si se discrimina por sector, casi 8 de cada 10 conflictos laborales estatales tuvieron un gremio atrás, mientras que en los privados aparecieron en 6 de cada 10 acciones.
ATE fue el sindicato que más respaldo dio en las protestas, con 37,5%. Le continúan los gremios de docentes universitarios, de la salud pública, de transporte y logística y de medios audiovisuales y prensa.
Asimismo, el 71,9% de las manifestaciones por despidos fueron encabezadas por empleados privados. "Es un indicio más acerca de los efectos negativos de la política económica sobre el mercado interno, y la estrategia de los sectores empresariales privados, que alentados en primer término por el Estado, realizan un ajuste mediante despidos", sostuvieron.
"La política aperturista de la gestión Cambiemos, sumada a los aumentos de los servicios públicos y a la pérdida de poder adquisitivo de los trabajadores y trabajadoras, erosionan al mercado interno, afectando sobre todo al sector industrial, donde se protagonizaron el 30% del total de las protestas laborales del ámbito privado", agregaron al justificar el descontento en las industrias y fábricas
La región centro, que incluye a las provincias de Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba, La Pampa y Entre Ríos, concentró el 35% del total de la protesta con 780 casos. Luego, siguen el área metropolitana de Buenos Aires con 597 casos, la Patagonia (426), el Nea y Noa, con 235 cada una, y Cuyo, con 74.
Una de las observaciones que más destacaron del CEPA es la tendencia creciente de la organización "multisectorial" de las protestas, las cuales representaron el 24% del total. Los reclamos multisectoriales surgieron por el fallo del 2x1 de represores, por la aparición de Santiago Maldonado y contra la reforma previsional, en diciembre de 2017. "Estas manifestaciones constituyen el germen de la multitudinaria jornada de protesta del día 21 de febrero de 2018 que fue encabezada por el gremio de camioneros, pero en la que participaron otros sindicatos de la CGT y CTA, los movimientos sociales como Barrios de Pie, la Corriente Clasista y Combativa, Movimiento Evita".