El presidente Mauricio Macri visitó a Rocío Valderrey, una adolescente con discapacidad que fue adoptada por un matrimonio cuando tenía cinco años y vivía en un hogar para chicos con parálisis cerebral.

El Jefe de Estado concurrió ayer acompañado por la ministro de Salud y Desarrollo Social, Carolina Stanley. Oscar y Marcela, los padres de Rocío, viven en la ciudad de Buenos Aires, se conocieron en el año 2000 y se casaron en 2009 para facilitar los trámites de adopción.

Le comentaron al Presidente que el proceso judicial de adopción fue largo y traumático. Rocío posee una discapacidad llamada “disgenesia del cuerpo calloso”, una malformación en fibras nerviosas del cerebro que dificultaban el habla y la motricidad.

Hoy puede comunicarse mejor, camina sin problemas y concurre a una escuela especial púbica. Oscar es dueño de un jardín de infantes integrador y Marcela directora de otro jardín. Él también fue adoptado, al igual que la madre de Marcela.