Mientras la CGT articula un paro general con calles vacías y sin movilizaciones ni actos para el próximo lunes, la izquierda y los gremios enrolados en el sindicalismo combativo impulsan una jornada de protestas activas, con cortes en todo el país y un acto central en el Obelisco porteño. Los piquetes en los accesos de la ciudad comenzarían a las 7 del 25 de junio.


Será la antesala del acto que realizarán este sábado por la mañana en el estadio del club Lanús, donde esperan la participación de 4000 delegados. Un detalle de contraste: por esas mismas horas, un sector de la CGT participará en Mar del Plata de la Semana Social de la Iglesia, organizada por la Comisión Episcopal de Pastoral Social, que será inaugurada por la gobernadora María Eugenia Vidal y la ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley.
"'Los Gordos' de la CGT quieren hacer un paro dominguero, para que después cada cual siga negociando lo suyo con el Gobierno. Van al paro porque los corrió la realidad y para reposicionarse en la interna sindical", dijo Néstor Pitrola , dirigente del Partido Obrero, que integra el Frente de Izquierda y los Trabajadores (FIT).
"Nosotros proponemos un paro activo, con movilización", porque sabemos que solo una demostración de fuerza de los trabajadores puede poner el fin al plan de ajuste", completó Pitrola.
Al mismo objetivo apuntó Alejandro Crespo, secretario general del Sutna. "El mensaje de rechazo al ajuste y a la vuelta del FMI no se puede dar sentado cada uno en su casa: es en la calle donde vamos a decirle al Gobierno que no se puede seguir con este camino", sostuvo, para apuntar también a la cúpula de la CGT: "Hay un cambio muy grande en el ánimo de los trabajadores. Lo vemos en las fábricas, en las escuelas. La CGT no puede ignorarlo".
Otra coincidencia en los gremios combativos y la izquierda es que el programa de ajuste del gasto que impulsa el Gobierno no es irreversible, incluso ahora que ese plan es parte del acuerdo con FMI.
"No estamos ante un escenario irreversible. Creemos que este plan se puede derrotar y por eso planteamos el paro activo como el inicio de un plan de lucha general", afirmó Guillermo Pistonesi, dirigente del PTS y de la mesa nacional del FIT. "Con un paro dominguero no alcanza y por eso la CGT tiene que estar a la altura", agregó.
Frente al actual cuadro de situación, la Casa Rosada se encontrará el lunes ante dos postales: las "calles vacías" que quiere mostrarle la CGT, para lo cual será vital el rol de los gremios del transporte, y los cortes y movilizaciones que encaren los gremios combativos y partidos de izquierda, que en esta ciudad confluirán frente al Obelisco, antes del mediodía.
Las organizaciones sociales y piqueteras también aparecen divididas frente a este escenario. Los grupos que en los últimos meses se acercaron a la CGT, como Barrios de Pie, la CTEP o el Movimiento Evita, por ejemplo, no tienen previstas actividades para el lunes. La Corriente Clasista y Combativa, en tanto, podría realizar cortes en La Matanza. Las organizaciones trotskistas, en cambio, serán parte activa en las protestas.