Miles de estudiantes, familiares y dirigentes políticos se movilizan hacia la Plaza de Mayo en defensa de la universidad pública y en reclamo por el presupuesto universitario.
Desde aulas a oscuras, ascensores solo para personas con movilidad reducida y restricción del gas hasta limitar las investigaciones universitarias, son algunas de las medidas adoptadas por las autoridades de la Universidad de Buenos Aires en las últimas semanas por la falta de fondos.
“Nos estamos financiando con el mismo presupuesto que nos dieron en 2023, pero con una inflación del 270% interanual”, detalló a la prensa Pablo Alejandro Rodríguez, decano de la Facultad de Odontología de la Universidad de Buenos Aires y agregó que, con base en esto, desde el rectorado de la UBA implementaron esa serie de acciones para solventar la crisis y poder seguir brindando clases por el mayor tiempo posible.
Con ese panorama, estudiantes, egresados y profesores lanzaron la convocatoria “Defendamos la universidad pública” para reclamar por el recorte presupuestario en la marcha del próximo 23 de abril.
Fuente: TN