En una entrevista que publica el diario Le Monde, el presidente dijo que su intención es pagar la deuda externa pero después de darse “un tiempo para reconstruir” la economía. También lamentó que el país se hubiera endeudado “en una velocidad inusual.”

Crédito foto: LeMonde - ED ALCOCK / MYOP FOR THE WORLD

Cuando Macron recibió a Fernández el miércoles, el Parlamento argentino aprobó la ley que otorga amplios poderes al gobierno, para reestructurar la deuda del país. Esto equivale a 311 mil millones de dólares (280 mil millones de euros), o el 91% del PIB, incluidos 44 mil millones con el FMI.

El mandatario argentino consideró “cumplidos” sus objetivos de su visita a 5 países europeos. “El primer objetivo era volver a Europa, porque siempre fui un europeista convencido”, remarcó.

“Lo que pido no es exorbitante, mi mensaje fue: pagaré la deuda, pero me daré tiempo para reconstruir nuestra economía. Y recibí un apoyo masivo de mis interlocutores”, afirmó.

En la entrevista, Fernández lamentó que el Congreso “no fue consultado” sobre el proceso de endeudamiento por la administración de Macri.

Aún así, juzgó que no se le puede “pedir al mundo de la especulación financiera que tenga ese tipo de reflexión”, más allá de que “era evidente que Argentina no podría pagar porque la economía estaba en recesión”.

El presidente denunció además que el cuadro de hambre extendido en el país formaba parte de una “realidad escondida” por la administración de Macri.

Por otro lado, defendió su intención de legalizar el aborto, para lo que enviará pronto un proyecto al Congreso, como parte de los derechos de las mujeres y de su condición de católico.

“El Papa conoce mi posición desde hace mucho tiempo. Soy católico, pero hay que separar el aborto de la esfera religiosa”, sentenció el presidente, que estuvo la semana pasada en el Vaticano con Francisco.