Fuerza Solidaria es un fideicomiso del Banco Provincia que en 2024 entregó 52 préstamos por más de 450 millones de pesos, récord para sus 18 años de existencia. 

“Para el sector cooperativo, la relación con las entidades financieras en general no es fácil ni fluida”, subraya Nadia Giardino, presidente de Provincia Fideicomisos, una de las compañías que integran el holding de la banca pública bonaerense que preside Juan Cuattromo. Desde su área, lograron ampliar el abanico de cooperativas que acceden a préstamos e incorporó una nueva facilidad para que las garantías presentadas por los solicitantes puedan ser invertidas en bonos que incrementen su capital.

Explica a Buenos Aires/12 que los requerimientos administrativos propios de un crédito son complejos y, en consecuencia, arduos y difíciles de cumplimentar. “Por su parte, un banco no puede prestar, a plazo mediano o largo, más de una vez el patrimonio neto de su eventual deudor, siendo que, muchas veces, el valor de los proyectos de inversión supera los patrimonios de las cooperativas antes de acometerlos”, señala.


“La estructura de los fideicomisos resuelve este impedimento”, asegura Giardino. 

Un fideicomiso es contrato en virtud del cual una o más personas transmiten bienes, cantidades de dinero o derechos, presentes o futuros, de su propiedad a otra persona para que ésta administre o invierta los bienes en beneficio propio o en beneficio de un tercero. De esta manera, se conforman fondos que pueden tener distintos destinos. En este caso, el BAPRO desarrolla este instrumento para abrir las puertas a créditos a las cooperativas. 

Además, Giardino advierte que, “por las particularidades de la figura legal-contractual y los objetivos sociales siempre involucrados, las pequeñas y medianas cooperativas son difíciles de bancarizar”. “Tengamos en cuenta que los beneficios que logran las cooperativas no quedan en sus balances, sino que se derraman a sus afiliados o asociados”, apunta.

Estas características propias de las cooperativas que suelen ser un impedimento en los bancos, el fideicomiso Fuerza Solidaria lo subsana. Esto le relata Gabriel Pampero, titular de la Cooperativa Apícola Pampero, a este diario. “No somos una cooperativa de servicio, somos una de trabajo, y cuando lo explicamos en los bancos no entienden bien cómo funcionamos, porque somos asociados y no dueños de lo que tiene la cooperativa, y los bancos piden que los firmantes tengan capital propio”, relata.


Hoy, por medio de este programa, accedió a tres créditos. El primero, en 2020, llegó para ampliar la infraestructura del laboratorio donde desarrollan el Aluén, su producto estrella. Se trata de una acaricida “único en el mundo” por sus componentes orgánicos y el alto índice de efectividad contra la varroa, un tipo de piojo, dicho en criollo, que ataca a las abejas y resulta ser la principal causa de muerte de este insecto en el mundo.

Fuente: Pagina12