Las acciones son en combinación con agentes pertenecientes al voluntariado ambiental.
Efectuan operativos de relevamiento de puntos recuperados y cestos destinados el arrojo de residuos.
Los objetivos son reacondicionar tanto el lugar como los canastos o containers si estuviesen en malas condiciones.
También intervenir con maquinaria para retirar los desechos acumulados, según el cronograma estipulado por la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable.
En simultáneo, programan acciones de concientización destinadas a los vecinos en la zona circundante para extender el cuidado del área mediante la colocación de cartelería con la leyenda “Prohibido arrojar basura” y entrega de folletería con para incentivar el reciclado.








