Un nuevo escándalo envuelve a la gestión del Jefe de gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Desde el Consejo Profesional de Química (CPQ) impugnaron los análisis sobre la presencia de asbesto en el subte que fueron presentados por Metrovías. El informe habría sido utilizado para "demostrar ausencias de contaminación por la presencia de amianto en las instalaciones", según consta.

Alimentaria San Martín, una empresa contratada por Metrovías para medir los niveles de contaminación, no contaba con la habilitación para ese tipo de labores y utilizó el sello del Consejo sin autorización.

El denunciado es Mario Ismach y deberá responder "por los delitos de usurpación de títulos y honores y uso de documento falso".