La crisis del sector automotriz continúa sumando brotes preocupantes en el mercado. En este caso General Motors decidió la suspensión de 1.500 trabajadores en acuerdo con SMATA bajo la consigna de no avanzar sobre despidos al menos mientras la situación sea evitable. La paralización de su planta en General Alvear Rosario en forma protocolar se enmarca en la merma de actividad durante invierno, por lo cual según consignaron fuentes de la compañía se realizará una "parada técnica" fabril, habrá adelanto de vacaciones ordenados de acuerdo al rango de licencia de los trabajadores en dos semanas de junio y dos de julio.
GM no es la excepción a un sector que expone capítulos de la crisis desde la merma de la actividad industrial, la baja en la venta de unidades cero kilómetro, la baja de comercialización de los usados e incluso otras áreas vinculadas como las autopartistas. Como número de rigor, en cuanto a salarios durante las suspensiones los trabajadores cobrarán el 70% de sus ingresos, explicaron desde GM a este medio. Al respecto de la cantidad suspensiones que no tendrán actividad en los períodos mencionados ese número podrá incrementarse a 2.500 empero la firma expresó que no se trata de trabajadores en relación de dependencia sino de proveedores.
El jefe regional de SMATA explicó a la prensa que la situación en la planta de General Alvear asume el cariz de alerta frente a la posibilidad concreta de despidos: "tratamos de pelear para que los empleados no salgan del sistema, por eso es que no nos quedó otra que acordar las suspensiones para evitar despidos", consignó Barros. La situación de GM como las de otras compañías, tal el caso de Toyota Argentina, se circunscribe dentro de la delicada situación del mercado automotor. En el caso de la japonesa, semanas atrás refrendaba que no habría suspensiones en su plantel, esas medidas llegaron más allá de que la tónica de la automotriz es, en todo el mundo, no tomar ese tipo de medidas en sus unidades de producción.
SMATA describió el escenario tomando como referencia las ventas de autos GM fabricados en el país en abril (302) "mientras que en Brasil se comercializaron 2500", la cual también consideraron insignificante tomado como referencia de análisis las dimensiones de ambos mercados.
El sindicato fustigó y calificó de "farsa" el plan del Gobierno Nacional para promocionar la venta de Okm "van a dar un subsidio de $40.000 cuando en las concesionarias te bonifican de $100.000 a $150.000".