Un creciente número de estudios confirma que asistimos a una aceleración del cambio climático de graves consecuencias y que las respuestas de gobiernos y responsables políticos son claramente insuficientes. Al mismo tiempo, se desarrollan propuestas alternativas para frenar ese cambio. El uso de la inteligencia artificial (AI) está llamada a jugar un papel central en ese combate. La iniciativa AI for Climate, proyecto seleccionado por el Foro de París por la Paz 2021, es un ejemplo. Por Braulio Moro, colaboración de France 24.
AI for Climate significa "Inteligencia Artificial por el Clima". Christopher Córdova, su director global, fue invitado a Francia en el marco de la 4a edición del Foro de Paris sobre la Paz, pues su iniciativa hace parte de uno de los 80 proyectos seleccionados a nivel internacional pues pueden ofrecer "soluciones concretas". Christopher Córdova es el invitado de Escala en París.
--La iniciativa que usted representa plantea "aprovechar el poder de la inteligencia artificial para ayudar a la resiliencia climática". Explíquenos cómo su organización concibe esa acción.
El objetivo principal es ayudar a acelerar la conversación y ayudar a organizar esta conversación sobre cómo las nuevas tecnologías -sobre todo la inteligencia artificial, y muchas más - pueden ayudar a conservar la conservación de la naturaleza, la conservación de la biodiversidad y también a la lucha contra el cambio climático. Necesitamos que sea más inclusiva, pero también mucho más efectiva y entonces podamos tener casos de uso de muchísimos países y de muchas industrias diferentes, y con esta perspectiva más amplia podamos ser más eficientes en la protección de la naturaleza.
Los proyectos en América Latina
Hemos conducido un proyecto muy interesante en la reserva de Dzilam, en Yucatán, México, con apoyo del gobierno de Quebec, en Canadá, también del gobierno local, y también con muchas instancias y académicos. Se trata de un manglar. Es un sistema fascinante, muy rico. Esta exploración permite ver cuáles son las tecnologías, los usos ideales, y también cuáles son los actores que tendrían que estar más adelante en la implementación de todo esto.
-- Afirman que "el derecho a un medio ambiente saludable y sostenible debe convertirse en nuestra máxima prioridad". No todos los gobiernos lo entienden así.
Efectivamente, hay mucho retraso en esta materia a nivel internacional, pero también partimos del hecho de que no estamos comenzando con una misma base. Hay una brecha tecnológica muy grande que lo hace muy complejo. Necesitamos una mesa común. necesitamos iniciar una conversación a partir de que estemas hablando el mismo idioma. Qué significa la inteligencia artificial aplicada para esto, es la primera pregunta que necesitamos tratar de responder.
Inteligencia artificial y medio ambiente
-- ¿Cómo puede usarse la inteligencia artificial en la preservación del medio ambiente, en este caso de las reservas naturales que buscan no solo proteger sino aumentar?
Un caso práctico es el sonido. Por ejemplo, la tala de montes. Una sierra eléctrica produce mucho ruido, distinto al sonido de un camión o de un ave. Los algoritmos se pueden entrenar para funcionar incluso a grandes distancias y a partir de eso geo referenciar dónde está ocurriendo. Ese es un caso concreto, pero se puede aplicar con el color, para identificar un tipo de peces, o en un coral. Se puede aplicar con patrones de migración de aves en una laguna. Se puede realmente entrenar a los algoritmos a que nos ayuden en todo eso.
-- El principio con el que trabajan es el de la "adopción", un sistema muy a la moda para captar fondos. Lo que ustedes proponen es "adoptar un pedazo de reserva, de territorio". Explíquenos sus ventajas y sus límites.
Primero que nada, es un tema de apropiación. Si sientes que algo es tuyo, si comienzas a identificarte con un espacio, con una reserva natural, una especie, un ecosistema concreto, incluso un metro cuadrado, llevado al terreno tan concreto de esta biodiversidad, de este sistema, se genera una identidad, se genera un vínculo. Eso es lo más importante porque ayuda a que haya mucha más receptividad y a comprender por qué un ecosistema está en riesgo.