Viene otro golpe al bolsillo. Y esta vez, por la suba del dólar, la canasta de productos típicos de Pascua aumentó un 61,9% en el último año, si se compara el valor de los productos que la integran entre marzo de 2018 y marzo de 2019, reveló el último informe del Observatorio de Políticas Públicas de la Universidad Nacional de Avellaneda (UNDAV) .

 A partir de un relevamiento de quince establecimientos comerciales del área metropolitana, y otros tantos del interior del país por canales digitales, el equipo de economistas de Economía UNDAV estimó un valor de $1.447 para la canasta estándar total: un 61,9% más que en 2018, en un análisis de precios para los principales productos, a partir de su evolución desagregada y el seguimiento de precios para los últimos años.

En el desagregado por producto también se cae en cuenta de subas sustantivas: por caso, el segmento de productos dulces presenta una suba promedio del 51,9% a partir de “rosca de pascua” (58,5%), “conejo de pascua” (+51,5%), “chocolate en barra” (+47,4%) y “huevo de pascua” (+50,3%).


En tanto, del grupo de productos ictícola se desprende un encarecimiento promedio del 71,5%: una suba que se explica, en gran medida, por el alza en el salmón (+74,7%), el camarón (+72,5%) y la merluza (+72,3%) y, en menor proporción, los langostinos (+66,6%). 


“Las principales causas de los incrementos de precios hay que encontrarlas en la suba del dólar de los últimos meses, el constante aumento de los costos internos (en especial de la tarifa de servicios públicos para los sectores industriales y comerciales) y subas puntuales en insumos de estación”, apunta el informe de la UNDAV, en relación a los aumentos.
En este marco, es posible deducir que la suba en los precios de la canasta de pascua ha sido asimétrica, dado que la canasta más económica fue la que más aumentó (+63,6%), seguida de la canasta estándar (61,9%), mientras que la canasta premium fue la que menos subió (+59,8%), impactando más fuertemente los aumentos en los sectores de menos recursos.


“Lo acontecido en el primer trimestre de este año denota un panorama negativo. La represión de salarios reales, a partir de paritarias por debajo de las expectativas de inflación, parece oficiar de limitante para la recuperación del consumo. Asimismo, la baja del salario real que se espera para este año se suma a las caídas consolidadas de los años previos”, indica el estudio universitario, en este sentido.


Y remarca: “En un contexto de retracción general, los productos con comportamiento estacional, por factores climáticos o festividades, verifican complejidades en cuanto a sus niveles de ventas y rentabilidad. Dada su característica de ‘consumo cultural no indispensable’, pueden ser reemplazados o suprimidos de la canasta familiar”.


Asimismo, si se compara el aumento en los productos con los ingresos de las familias, se cae en cuenta que con un salario mínimo de 2018 se podían comprar casi 24 canastas económicas mientras que con el salario mínimo actual no alcanza siquiera para las 20 canastas.


De este modo, la canasta de productos de pascua aumentó 36,2 puntos porcentuales por sobre el nivel general de inflación, en los últimos tres años. Es decir que cada vez se debe destinar una mayor proporción de los ingresos para costearla.