La Cámara de Diputados aprobó el proyecto que deroga las leyes Cerrojo y de Pago Soberano y de autorización de endeudamiento del Estado con un límite de 12.500 millones de dólares, para cancelar los pagos acordados con los fondos buitres. La diputada nacional de Quilmes se manifestó luego de la votación.
Por 165 votos a 86, el macrismo y sus aliados aprobaron en diputados las condiciones del Juez Griesa para convalidar el acuerdo con los bonistas más duros.
“El proyecto que hoy estamos tratando es un quiebre de cara al futuro de nuestro país” remarcó la diputada nacional por el Frente para la Victoria Mayra Mendoza.
La legisladora puntualizó “Hay necesidad de “acordar” con los buitres porque quieren reiniciar un ciclo de endeudamiento. No es urgencia ni herencia, es creencia en un plan económico de ajuste. El presidente Macri amenazó que si no hay pago a los buitres, habrá ajuste o hiperinflación. Sin dudas es una extorsión como la que también ejercen sobre los gobernadores y ellos condicionan a los representantes del pueblo en el Congreso. Resolvamos este tema pero de pie, con dignidad, no de rodillas”.
“Me sorprenden aquellos diputados y diputadas abanderados de la calidad institucional, hoy no tienen ningún tipo de inconveniente en someterse a los plazos que les imponen un juez de Nueva York y un representante de lo que ellos mismos califican como la peor lacra del capitalismo financiero” expresó la diputada.
Por otra parte remarcó “Néstor Kirchner lo planteó claramente “los muertos no pagan”. El 2001 nos dejó varias enseñanzas. Creo que la fundamental es que los más humildes del pueblo no toleran el hambre, que el peso de la deuda externa no puede caer sobre las espaldas del pueblo y que nosotros como sus representantes, no podemos llevar a la Argentina nuevamente hacia ese nefasto destino.
Si este proyecto se llegara a aprobar, pierden los pueblos, no solo el nuestro, sino los pueblos del mundo. Apelamos a la responsabilidad, el patriotismo y el compromiso de los diputados para su rechazo. No traicionen a la patria, seamos soberanos!»