Se trata de la disposición 946/2018, de La Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología (ANMAT), que autorizó la venta bajo receta archivada de la droga, la cual, por primera vez se podrá adquirir en farmacias para la interrupción del embarazo en los casos que contempla la ley. Hablan ambos sectores de la grieta.
El MISOP 200, comprimidos vaginales, es el medicamento que se utiliza en casos de interrupción del embarazo, el cual, en agosto, había sido habilitado por la ANMAT para venderse en forma farmacéutica en comprimidos vaginales, bajo la condición de venta bajo receta archivada, para uso institucional y hospitalario exclusivo.
Actualmente las farmacias venden una sola presentación de misoprostol combinado con diclofenac, Oxaprost, y sólo se permite su compra para uso gástrico.
Este medio dialogó con Isabel Reinoso, titular de la Confederación Farmacéutica Argentina, quien dijo: "ahora cambia la presentación, es decir, el misoprostol que se vendía era de 16 comprimidos y excedía la cantidad que una paciente necesitaba, lo cual provocaba la reventa por mercado negro del resto de los comprimidos" dijo y agregó que "sigue siendo venta bajo receta archivada, como era anteriormente."
Por su parte, Mariano obarrio, periodista e impulsor de la campaña 'Salvemos las dos vidas' -contra la legalización del aborto-, opinó: "La resolución de la ANMAT es peligrosa porque abre la posibilidad a que cualquiera pueda conseguir recetas y se abra la posibilidad de abortos que no están previstos en el protocolo ILE -Interrupción Voluntaria del Embarazo-", dijo el activista: "nosotros nos oponemos terminantemente porque puede ser una manera de legalizar de manera encubierta el aborto que está contemplado como delito en el Código Penal".
Por su parte, Reinoso sostuvo: "esta resolución no es ilegal, es para uso ginecológico, con prescripción médica y con receta", y anfatizó: "ahora sólo se autoriza a un laboratorio que ya distribuía en hospitales, a que se dispense el producto en farmacias legalmente autorizadas".
En tanto, Obarrio redobló la apuesta: "La venta de misoprostol en farmacias puede terminar generando abortos clandestinos, lo cual todos queríamos rechazar; para nosotros el aborto es ilegal porque así lo dice el Código y lo ratificó el Congreso".
Laura Salomé es Periodista y activista de la Campaña por el aborto legal, seguro y gratuito': "lo más importante de esta resolución es que reconoce el uso ginecológico como lo indica la Organización Mundial de la Salud y como lo hemos indicado nosotros en las presentaciones del Congreso", sostuvo y continuó: "hasta ahora la forma de comercializar el misoprostol era monopólica".
Además, Salomé manifestó: "El primer cliente de Laboratorio Domínguez -el encargado de producirlo-, fue la Ciudad Autónoma de Buenos Aires para garantizar en Centros de Salud las interrupciones voluntarias del embarazo, las cuales ya son legales en nuestro país desde 1921; por causales de salud y de peligro de vida para la persona gestante".
Reinoso también propició su opinión: "De esta manera se va a evitar la comercialización ilegal del producto y va ser exclusivamente en casos de indicación medica, como corresponde, y en farmacias habilitadas; esto termina con canales paralelos y de medicamentos adulterados."
Esta aplicación se prevé en todo el país, exceptuando las provincias de San Juan y Mendoza, que no tienen autorización de dispensar estos medicamentos. Se comenzaría a implementar antes de fin de año.
TESTIMONIOS:
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