Rubén López, uno de los hijos de Jorge Julio López, el albañil sobreviviente de la dictadura que desapareció en 2006 durante el juicio en el que testificó contra el exrepresor Miguel Etchecolatz, aseguró que la de su padre fue una "desaparición perfecta", debido a que, a 15 años de ese hecho, la causa "tiene 50 cuerpos, 48 anexos y ninguna pista firme".

"Esta segunda desaparición les salió bárbaro, es perfecta, nadie sabe nada, nadie habla", expresó a Télam Rubén López, quien contó que aún tiene esperanzas de "que alguien hable" y le diga "qué pasó" con su "viejo".