Con más de 250 participantes de todo el país se llevó a cabo una nueva conferencia virtual de Findel. En esta ocasión fue "Diseñando un plan integral de seguridad vial local".

La jornada se inició con la presentación del presidente de la Fundación Internacional de Desarrollo Local Daniel Cravacuore. Recordó que el fundador de Findel, Julio Pereyra, fue premiado por las acciones en ese sentido durante su gestión como intendente de Florencio Varela.

La disertación estuvo a cargo de Alejandro Guzmán Vega, ingeniero especialista en la materia. Comenzó con los datos duros que llevan a 1 millón 400 mil la cifra de muertos en accidentes de tránsito. "Venimos de una pandemia mayor, que es la siniestralidad vial. Es la pandemia del dolor", sentenció el ingeniero.

Se remontó al primer accidente vial documentado. Contó que el diario tituló "Esto no debería suceder nunca más", y agregó que "el automóvil iba a 17 km por hora".

El expositor señaló que "la principal causa de muerte en chicos de 15 a 29 años son los traumas por accidentes de tránsito o los suicidios, que muchas veces son por pesares por las pérdidas en accidentes de tránsito". En ese sentido recordó que "es la franja etárea más económicamente activa".

Además de los datos que fue proporcionando a lo largo de la charla, un momento de alto impacto se experimentó cuando Guzmán exhibió una radiografía con fractura de cráneo. Después de describirla, sorprendió al informar que era suya. Estuvo en coma por las graves lesiones sufridas en un accidente en el que murió su mamá.

Sobre las causas de los accidentes mencionó el "exceso de velocidad, la distracción, el uso de psicoactivos, el no respeto de las normas de tránsito. La falta de mantenimiento. Y la fatiga que nadie menciona. Es el desencadenante de muchos siniestros. La fatiga se acumula, el descanso no. Tenemos una carga mental muy elevada".

El especialista advirtió que "Cuando salgamos de la pandemia vamos a hacerlo de forma desordenada." Señaló que "teniendo en cuenta la restricción actual, el número de accidentes sigue siendo elevado. Hay que impulsar el transporte alternativo, mejorar las veredas. Evitar el uso de transporte masivo. Pero va a haber más vehículos. Hay que hacer planes estratégicos de seguridad vial articulando con el sistema de salud. No todo es responsabilidad del estado. No veo que las aseguradoras aporten. Ni las grandes empresas. Tienen que ser co-responsables".

En ese sentido explicó que al estado argentino cada víctima fatal le cuesta 1 millón 800 mil dólares, con 6 mil víctimas fatales por año. Es decir, 11 mil millones de dólares por siniestralidad vial. Dinero que podría destinarse a otros fines.

Por eso insistió en que hay que desarrollar planes integrales en los gobiernos locales que deben tener 4 pilares: Formación, infraestructura, gestión y control.

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